el campo

el campo, el rancho, la labor, el sol, la alborada, el amanecer, el taco, las tortillas, una cecina, mis frijoles, chilaquiles, una vaca, un perro y un caballo, abajito de un mezquite acostado a su sombra mientras miro la tranquilidad del campo y me acuerdo de la chinga que es trabajarlo, de aguantar el sol de las 12, de ir fertilizando y llevar la espalda cultivando tu nueva joroba por el peso de la bomba de fertilizante, ver como mi abuelo si aguanta tal chinga y yo no, como me gana el paso cuando vamos caminando por cada surco, como me escondo para que ya no me lleve, y que no me levante tan temprano, de como me grita por que no fertilizo bien o por que no tiro abono como es, de ir cantando todo el zurco como loco por que ya te quieres ir, de como la comida sabe a gloria cuando acabas o la tranquilidad y la brutalidad del campo, para hombres duros y nobles, antiguos y fuertes, como me acuerdo desde abajo de este mezquite de la tranquilidad y la brutalidad del campo